En una distendida charla en la Casa de la Cultura de Lanús, el
intendente, Néstor Grindetti recibió al escritor e historiador, Eduardo
Sacheri. Dialogaron sobre fútbol y la pasión compartida por Independiente, la
infancia en el barrio, los padres, los libros y la educación.
El escritor Eduardo Sacheri afirmó que
“cada libro que lees representa una vida más que vivís”, al tiempo que destacó
su preferencia por la lectura antes que la escritura. “Si en algún momento algo
debo abandonar, prefiero que sea escribir, pero nunca dejar de leer”
sentenció.
Autor de destacadas obras literarias,
apasionado por el fútbol, Sacheri también habló sobre sus facetas de
historiador y docente. “Si bien todos coincidimos en afirmar que nos interesa
la educación, al momento de demostrarlo no existe tal acompañamiento a esta
sentencia”, opinó.
Recordó que “cuando mi carrera
literaria empezó a crecer, no dejé de ejercer la docencia en la escuela
secundaria ya que es un ámbito sumamente necesario para que los chicos
adquieran conocimiento”.
En sintonía con la afirmación del
intendente Grindetti acerca de que “la educación es lo que hace rica a una
Nación”, Sacheri reflexionó que “nuestros padres apostaron a que nos educáramos
para llegar un poco más lejos que ellos, y creo que no deberíamos
renunciar a esto”.
El escritor dejó éstas y otras
afirmaciones durante una charla compartida esta tarde con el intendente de
Lanús, Néstor Grindetti, en su ciclo “Conversaciones”, que se transmite por las
redes sociales del Municipio y convoca a destacadas personalidades de la
sociedad, para analizar temas de actualidad.
Juntos evocaron emociones comunes a lo
largo de sus vidas como hinchas de Independiente, entre ellas, aquella tarde de
2002 en la vieja cancha de la doble visera de Avellaneda cuando el Rojo le
empató a Boca cerca del final con un recordado gol de Lucas Pusineri, y dio un
paso decisivo hacia su consagración como campeón del torneo Apertura de ese
año.
También la memorable semifinal de 1975,
cuando Independiente derrotó 3-0 a Cruzeiro de Belo Horizonte en un histórico
partido de Copa Libertadores que inspiró a Sacheri para escribir uno de sus
cuentos futboleros más emotivos, "Independiente, mi viejo y
yo".
Contaron, además, su visión respecto de
lo que significó Diego Maradona, no solo como el máximo exponente del fútbol
argentino a nivel mundial, sino también como ídolo y figura popular.
Sacheri puso de relieve el valor que
tuvo ese deporte en su formación personal e intelectual a partir de su fuerte
influencia como fenómeno deportivo y cultural. “El fútbol es como el juego de
mi vida, porque desde que nací en la vereda se jugaba al fútbol, se escuchaba
los partidos de Independiente por la radio y se los veía por televisión en
blanco y negro” rememoró.
A su turno Grindetti aportó que “es una
escuela de vida. El pueblo argentino es pasional y este juego nos permite
compartir momentos inolvidables en familia y con amigos. Más allá de lo lindo
del deporte, genera una relación que emociona”.
Más adelante Sacheri cuestionó que el
excesivo fanatismo de algunos y la derivación violenta que eso conlleva
haya terminado alejando a mucha gente de la fiesta del fútbol. "Hemos
terminado naturalizando que desde hace siete años los visitantes no puedan ir a
las canchas", lamentó.
Sobre sus inicios en el arte
literarios, reveló que nunca se planteó ser escritor y empezó como una
actividad paralela por placer. “Siento que escribo para entender el mundo en el
que vivo y que sencillamente se reduce a mi lugar, Castelar”.
Tras recordar la trascendencia alcanzada
por la lectura de sus cuentos de fútbol en radio Continental, el intendente de
Lanús destacó su “enorme capacidad al escribir y transmitir de forma
espectacular cada uno de sus relatos. Es como ver una película”,
graficó.
Sobre sus infancias en Villa Atlántida
y Castelar, Grindetti y Sacheri coincidieron respectivamente en añorar la
fraternidad que unía a los vecinos aún por encima de la familia. “La calle era
de todos y el barrio muy importante y contenedor en la etapa de la
niñez”, dijo el escritor y agregó “hoy el gran Buenos Aires es un lugar de
puertas adentro y lo vivo como una gran derrota. Valoro aquel lugar donde se
trabajaba e intentaba progresar”
Al recordar a sus padres Sacheri indicó
que heredó de él la paciencia con los chicos, que le sirvió mucho para el
ejercicio de su profesión de docente. En tanto Grindetti destacó el amor de su
progenitor por las palomas, era un destacado colombófilo y participaba en
competencias con sus aves mensajeras, aunque nunca logró que se vincule con esa
actividad.
Ambos destacaron la importancia de las
herramientas tecnológicas fundamentalmente en este año dominado por la pandemia
de Coronavirus, No obstante Sacheri consideró que el rol de los docentes en el
aula en forma presencial es irreemplazable. Una de las grandes pérdidas de este
año fue la opción de no poder vincularnos cara a cara”.
Sobre el final de la charla transmitida
por las redes sociales del Municipio, Grindetti y Sacheri se sometieron a un
ping pong de opiniones a partir de distintas imágenes y símbolos. Ante el
escudo de Racing Club de Avellaneda, Sacheri afirmó “es el rival al que más
querés ganar pero siempre desde el respeto y no desde el odio”.
Sobre Lionel Messi en tanto
coincidieron en su común admiración “un virtuoso que juega en equipo”, dijeron,
en tanto que ante una imagen de gente con barbijos señalaron que será sin dudas
el símbolo del 2020, que nos demuestra lo endeble del ser humano.
Asimismo, se aprovechó la ocasión para
hacer entrega de la mención de "Huésped de Honor" al escritor de
manos de la secretaria de cultura del municipio, Thelma Vivoni.
Sacheri fue el tercer invitado del
ciclo “Conversaciones con Néstor Grindetti”, ya que en anteriores entregas,
siempre transmitidas en vivo a través de Instagram y Facebook Live, el Jefe
Comunal dialogó con el economista Carlos Melconian y el diplomático y ex
canciller argentino Jorge Faurie.
Prensa: Lanús Municipio